Mario Romero.- No será ni la primera ni la última vez en la cual se menciona la opción de un iPhone construido en cristal y el hecho que iOS16 estrenase Liquid Glass, bien podría ser parte de esta estrategia.
El nuevo diseño Liquid Glass de Apple en iOS 26 podría estar insinuando un importante rediseño de hardware que llegará a los futuros iPhones, considera el veterano desarrollador de aplicaciones Craig Hockenberry de The Iconfactory.
En una publicación de blog publicada esta semana titulada «Liquid Glass. ¿Por qué?«, Hockenberry argumenta que, a diferencia de la transición de iOS 6 a iOS 7, que abordó una necesidad genuina de interfaces simplificadas, nadie fuera de Apple estaba clamando por «más vidrio fluido en nuestros diseños».
Hockenberry sospecha que Liquid Glass está preparando a los desarrolladores para los próximos cambios importantes de hardware más adelante. Mientras actualizaba sus aplicaciones para iOS 26, dice que notó un patrón claro en los requisitos de diseño de Apple: «Nunca quieres un control o contenedor que toque el borde de la pantalla».
El requisito recuerda a Hockenberry los insertos de área segura de iOS 11, que parecían inútiles en ese momento, hasta que el iPhone X de 2017 introdujo más tarde la muesca y un indicador de inicio en lugar de un botón de inicio. Hockenberry cree que el requisito similar en Liquid Glass es que Apple sienta las bases para dispositivos con pantallas «envolturas», «donde la pantalla desaparece sin problemas en el borde físico» utilizando tecnología OLED flexible.
Es una teoría plausible, dados los informes recientes sobre los planes de Apple para el aniversario del hito del iPhone en 2027.
Por su parte, el medio ET News ha afirmado que Apple está desarrollando pantallas de «flexión de cuatro bordes» que envolverían todos los lados del dispositivo, creando un diseño verdaderamente libre de bisel.
Bloomberg y The Information han corroborado rumores similares, describiendo el dispositivo del 20 aniversario de Apple como un «iPhone curvo en su mayoría de vidrio y sin recortes».
Si Hockenberry tiene razón, las reglas de diseño conscientes de los bordes de iOS 26 bien podrían estar preparándose para el rediseño de iPhone más ambicioso de Apple hasta la fecha.
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