Con una oferta de compra por sobre los US$30 mil millones hecha por Perplexit, el mercado y analistas se preparaban, junto con los accionistas de Alphabet, la matriz de Google, a vender el navegador Chrome debido a un juicio antimonopolio.
Pero la historia ha tenido un giro en las últimas horas.
Según consigna CNN, un tribunal finalmente, no obligará a Google a vender su navegador Chrome o Android.
La decisión sirve como una victoria significativa para la compañía de tecnología, que ha evitado el resultado más extremo posible de un caso antimonopolio histórico que determinó que la compañía estaba operando un monopolio ilegal de búsqueda en línea.
Aunque Google no se verá obligado a vender su navegador Chrome o Android, se le prohibirá celebrar o mantener contratos exclusivos relacionados con la distribución de servicios como Chrome, Search, el Asistente de Google y su aplicación Gemini.
Esos acuerdos proporcionan una fuente significativa de ingresos para Google y un amplio acceso a sus servicios, aunque la compañía había propuesto abandonar esos contratos como un posible remedio en el caso.
El juicio puso el negocio principal de Google bajo un microscopio en un momento en que ya está bajo la amenaza de ser derrocado por los chatbots de IA. Y llega cuando la compañía también se está preparando para defender el funcionamiento de su negocio de publicidad en línea después de que también se descubriera que era un monopolio ilegal a principios de este año.
El fallo fue observado de cerca ya que otros grandes gigantes tecnológicos también están luchando contra casos antimonopolio presentados por el gobierno de Estados Unidos.